La Selección de Italia tiene
claro que no hay espacio para el error en Brasil 2014. Tras perder la final de la
Eurocopa 2012 quiere dejar claro que su quinto título mundial será este año.
Foto: Getty Images
En el mundial de Alemania 2006,
el mundo estaba enfocado en lo que Brasil, con Ronaldinho y compañía, podría
hacer dentro de un campo de juego. También en que ese sería el último torneo
Zinedine Zidán, considerado uno de los mejores jugadores de la historia.
Todos se olvidaron de Italia,
pero la ‘azurri’ tenía claro que ser campeones mundiales era un objetivo real y
nada disparatado. Sin un fútbol tan llamativo, los italianos se olvidaban de la
pelota y mataban a sus rivales en algún contragolpe. Italia fue el campeón del mundo
en 2006.
Han pasado solo ocho años desde aquella
proeza en Berlín, y el equipo ha cambiado todos sus elementos, a excepción de Gianluigi
Buffon, Andrea Pirlo y Daniele De Rossi. El resto del plantel jugará su segundo
o primer mundial. Y a pesar de que han pasado ocho años, esos tres jugadores
siguen siendo la base del equipo que ahora dirige Cesare Prandelli.
El juego de los italianos se
caracteriza por dilatar mucho el juego en la mitad del campo. Pirlo es el
péndulo del equipo y quien manejo los tiempos dentro del campo. Mario
Balotelli, Alesio Cerci y la revelación de la Serie A, Ciro Inmobile son lo que
aportar en la ofensiva con su talento innato para marcar goles. Además, el
técnico llevará entre los convocados a quien la prensa europea considera como
el sucesor de Pirlo, Marco Verratti, el talentoso volante del PSG.
POSIBLE ONCE: